Dificultad: Media
Otra de las delicias de estas fechas son los pestiños. Pueden hacerse de muchas formas con dicersos ingredientes pero la receta que más nos gusta en casa es la siguiente:
- 1 vaso de aceite de oliva.
- 1 vaso de vino blanco.
- 1 cucharada sopera de ajonjolí.
- 1 cucharada sopera de matalauva o anís en grano.
- 3 tiras de cáscara de limón (sólo lo amarillo).
- 1 pellizco de sal.
- Harina de trigo.
- Aceite de girasol para freir.
- Miel.
Elaboración:
En primer lugar ponemos el aceite en un sartén y le añadimos el anís, el ajonjolí, la cáscara del limón y tostamos para que el aceite pierda su sabor crudo. Apartamos y dejamos enfiar.
Una vez frío el aceite pasamos por un colador a un bol y añadimos el vino blanco, la sal y la harina poco a poco hasta que veamos que nos queda una masa homogénea sin que se nos pegue a las manos ni a la encimera. No ponemos cantidad de harina puesto que la cantidad es la que vaya admitiendo la masa. Dejamos reposar durante 15 minutos cubierta de un paño.
Pellizcamos la masa y la estiramos con la ayuda de un rodillo del grosor que deseemos. A mí personalmente me gustan finos, así que estiro bastante la masa. Cortamos la masa estirada en cuadrados y le damos la forma al pestiño. Freimos en un sartén con abundante aceite de girasol y dejamos enfriar.
Por otro lado, ponemos la miel en un cazo y la rebajamos con un poco de agua y dejamos a fuego medio. Una vez haya roto el hervor vamos introduciendo los pestiños para que se empapen de miel y retiramos. Dejamos enfriar un poco y listos para degustar.
Así de fácil, así de rico.
Espero que os haya gustado.
Un saludo.
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